Más de 337 mil personas de Quintana Roo han sido víctimas de ciberacoso en los últimos 12 meses, un impacto del 25.7% de la población, el quinto índice más alto a nivel nacional, mientras el uso de equipos tecnológicos incrementa a consecuencia de la pandemia.

Las cifras del Módulo sobre Ciberacoso (MOCIBA) 2021, dada a conocer ayer, indican que de los 337 mil 786 usuarios que fueron blanco de estas acciones, el 52.4% (177 mil 070) fueron mujeres, siendo el rango de edad principal, jóvenes entre 20 y 29 años de edad. 

En el caso de los hombres, 160 mil 716 fueron blanco de acciones de acoso a través de internet o redes sociales, de ellos, el grupo más afectado fue entre los 12 y 19 años, al sumar un total de 41 mil 113, que representan el 31.7% del total. 

El tipo de infracción más cometida es el contacto a través de identidades falsas (36%), insinuaciones y propuestas sexuales (34.2%), así como mensajes ofensivos (31.8%). 

Renata Díaz Barreiro, integrante de la asociación civil Alumbra, señaló en su oportunidad que la principal preocupación recae en la falta de denuncia de estos delitos, ya que se ha documentado que sólo el 0.2% de estas faltas son reportadas a las autoridades y 5% a los proveedores del servicio. 

“El problema del ciberacoso no ha mantenido una sana distancia durante esta pandemia, pero tampoco es tarde para que padres de familia o tutores de menores de edad hagan algo para evitar que niñas, niños y adolescentes caigan en este tipo de práctica que atenta contra su seguridad”, dijo.

La encuesta del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), reveló que de los 264 mil 146 usuarios que tienen de 12 a 19 años, 216 mil 194 tomaron medidas de seguridad para proteger su identidad y equipo, pero 18.2% (47 mil 952) no llevaron a cabo ninguna. 

Algunas de las medidas más comunes fueron crear o poner contraseñas, instalar antivirus, bloquear ventanas emergentes, cambio periódico de contraseñas, no abrir ni guardar archivos de personas extrañas.