El ex presidente estadounidense Barack Obama dijo una vez que cumpliría un tercer mandato siempre y cuando no tuviera que hacer todo el trabajo preliminar.
“Si pudiera hacer un arreglo en el que tuviera un suplente, un líder o una líder, y ellos tuvieran un auricular y yo estuviera en mi sótano en sudadera… y entonces podría decir las líneas, pero alguien más estuviera hablando y haciendo toda la ceremonia, eso me parecería bien”, comentó Obama al comediante liberal Stephen Colbert en noviembre de 2020.
Suena familiar, ¿no?
Según varios medios de comunicación, Obama ha estado haciendo sentir cada vez más su presencia en la Casa Blanca de Joe Biden, con problemas cognitivos. Los informes publicados por CNN, el New York Times y The Washington Post , propiedad del Estado Profundo, han promocionado la intensificación de la participación del expresidente en los esfuerzos de la administración, una señal no tan sutil sobre quién está realmente a cargo.
“Ha sido generoso con su tiempo y ha dejado muy claro que está totalmente involucrado en esta campaña”, dijo recientemente a CNN un alto asesor de Biden .
“Barack Obama ayudó a redactar la nueva política de inteligencia artificial de la Casa Blanca que el presidente Joe Biden implementó a principios de esta semana”, informó ABC News en noviembre pasado.
Aparte de las numerosas conversaciones , llamamientos para recaudar fondos y reuniones que Obama ha tenido con Biden en los últimos años, la demostración de poder más pública del expresidente se produjo cuando entró en el número 10 de Downing Street en Londres el mes pasado para una “visita de cortesía” de una hora de duración con El actual Primer Ministro del Reino Unido, Rishi Sunak.
Si bien ha sido difícil obtener detalles sobre la reunión, el parlamentario británico George Galloway teorizó que se llevó a cabo para dar luz verde al ataque terrorista en Rusia que mató a más de 140 civiles el 22 de marzo.
“Nadie ha explicado la visita no anunciada del ex presidente Barack Obama para reunirse con políticos y funcionarios de seguridad británicos en Downing Street tres días antes de que se cometiera este crimen terrorista”, exclamó Galloway .
“Estados Unidos, sus aliados de la OTAN y su estado títere Ucrania son, de hecho, responsables de esta masacre”, alegó además, señalando los comentarios de la ex diplomática estadounidense y autor intelectual de Ucrania de Obama, Victoria Nuland, quien anteriormente dijo que Rusia debería esperar “bonitas sorpresas” en 2024.
Cualquiera que haya sido el papel de Occidente en la masacre de Moscú, el papel de Obama en Washington es inequívoco. Un artículo del Wall Street Journal publicado en mayo de 2023 se publicó con el título “Este es el tercer mandato de Obama”. El subtítulo decía: “Mire a los actores clave de la administración Biden”, en referencia a la gran cantidad de empleados actuales de Biden que trabajaron bajo la administración de Obama.
Un artículo que apareció en el Tablet en agosto de 2023 declaraba claramente: “Joe Biden no está dirigiendo la política exterior de su administración. Es Obama. Ni siquiera tiene que levantar el teléfono porque toda su gente ya está dentro de la Casa Blanca”.
En abril de 2022, la presentadora de Fox Business, María Bartiromo, también sugirió a la senadora republicana estadounidense Marsha Blackburn, de Tennessee, que Obama, que todavía tiene una residencia en DC, estaba “dirigiendo el país”. A lo que Blackburn respondió : “Sabemos que el equipo de Obama ha estado tomando las decisiones”.
El mes pasado, Biden, Obama y el expresidente Bill Clinton aparecieron en una recaudación de fondos conjunta en el Radio City Music Hall de la ciudad de Nueva York. Si bien los expertos explicarán que poner al trío en el escenario fue una forma inteligente de aumentar las donaciones ( lo cual fue así), la verdadera razón por la que Obama y Clinton estuvieron allí fue porque Biden se habría quedado dormido si hubiera tratado de hablar con el presentador Stephen Colbert durante una hora.
El hecho es que Obama está dando un paso adelante para “ayudar” a la campaña porque Biden simplemente es demasiado viejo y senil para hacerlo él mismo. También quiere seguir trabajando desde su sótano en pijama mientras su títere Biden hace y dice lo que quiere. Es difícil culparlo.