El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, instó el miércoles a la administración Biden a actuar concretamente y con rapidez para abordar las causas que provocan la profunda crisis migratoria que afecta a ambos países. 

“Basta de hablar, es hora de actuar“, dijo López Obrador a los periodistas el miércoles 22 de septiembre mientras miles de haitianos y otros migrantes se concentran en la frontera norte de México, buscando ingresar a los Estados Unidos como refugiados, motivados por la flexibilización en políticas migratorias por parte de Estados Unidos, reportó News Max.

Es la primera vez que, desde la llegada de Joe Biden a la presidencia de los Estados Unidos, Obrador se pronuncia tan críticamente contra las autoridades estadounidenses respecto a esta problemática que parece haberse salido de control.

Obrador no escatimó palabras en su reclamo a Estados Unidos, instando a que tome medidas urgentes para abordar la crisis migratoria que repercute en las Américas.

Decenas de miles de migrantes, muchos de ellos haitianos que anteriormente vivían en América del Sur, han llegado en las últimas semanas a México con la esperanza de ingresar a Estados Unidos.

Los inmigrantes recientemente arribados, se han encontrado varados en una ciudad abarrotada del sur de México en el límite con Guatemala y lo mismo sucede en el norte en la frontera con Estados Unidos, donde sus esperanzas de recibir asilo se desvanecen rápidamente ante la presencia de decenas de miles de personas en la misma situación.

México y los países centroamericanos aún están a la espera de varios miles de millones de dólares prometidos por Washington, reclamó Obrador. Las inversiones fueron pensadas con el objetivo de buscar que el desarrollo económico reduzca la necesidad de los centroamericanos de migrar hacia los Estados Unidos huyendo de la pobreza.

“Había un compromiso de que iban a invertir cuatro mil millones, dos mil millones para Centroamérica y dos mil millones para México. Nada ha llegado, nada“, dijo López Obrador.

Luego, Obrador, suavizó un poco su discurso afirmando que Biden “está interesado” en resolver el problema, y aunque hasta el momento no ha realizado acciones concretas, espera que si las implemente a futuro.

Mientras la ola de migrantes, principalmente de Haití tras los desastres naturales padecidos en su país, amenaza con colapsar las estructuras migratorias de México y Estados Unidos, los funcionarios mexicanos han comenzado a tomar medidas enérgicas para frenar el avance. 

En diversas localidades, los funcionarios ordenaron bloquear los autobuses de migrantes para que no lleguen a las comunidades en la frontera entre Estados Unidos y México y planean enviar a los haitianos de regreso a sus países de origen.

Mientras tanto, bajo el puente que une a la pequeña ciudad de Del Rio, Texas, con México, se concentran casi 15.000 inmigrantes ilegales, informó el representante republicano August Pfluger cuando visitó la zona. 

Para Pfluger, así como para la mayoría de los republicanos y también autoridades internacionales de países afectados por esta situación, como el caso de México, es de necesidad urgente que el gobierno de Biden, reconozca la crisis y tome acciones. 

Marcelo Ebrard, el canciller mexicano, conversó esta semana con el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, a quien le habría dicho que es necesario un acuerdo regional sobre migración de forma urgente para tratar la magnitud de la crisis. 

Se espera que Blinken, Ebrard y los cancilleres centroamericanos discutan este tema el jueves en la Asamblea General de la ONU en Nueva York.

(blesmundo)